Foto tomada de la web OkChicas

Por: Eliana Buelvas Pereira

Una esteticista cosmetóloga debe tener como prioridad la higiene, cuidado y orden de los productos con los cuales va a trabajar con sus usuarios.

Ciertamente en los maquillajes y utensilios encontraremos gérmenes normales que por arrastre de la utilización en nuestra piel, los llevamos a los pinceles, brochas, esponjas, inclusive a los cosméticos. No obstante, algunos microorganismos patógenos como por ejemplo el Staphylococcus aureus, E. coli, salmonella, entre otros, pueden también desarrollar un crecimiento si no se mantienen los cuidados necesarios, conduciendo el riesgo a ocasionar infecciones en la piel como el impétigo, que se contagia por contacto en las zonas mucosas de la cara. Así mismo las pústulas que se originan por crecimiento de bacterias como producto de un acné mal cuidado y se transmite al no desinfectar las esponjas o por introducirlas directamente a un producto cosmético.

También pueden ocurrir infecciones en los ojos, tales como conjuntivitis bacteriana que se transmite por el mal uso de las máscaras de pestañas y lápices delineadores que se aplican en la parte interna del ojo, ocasionando dolor, ardor y comezón; por lo tanto se recomienda  sacar la punta de los lápices para remover cualquier bacteria que se pueda encontrar en la superficie de este. Igualmente se pueden dar infecciones en la boca como el  herpes, por esto es aconsejable esterilizar perfectamente los pinceles de labios y nunca aplicar el labial directo en la boca.

Es también de cuidado tener precaución con el almacenamiento de estos, en  lugares húmedos se puede promover el crecimiento de hongos y moho, ya que la humedad condiciona el medio favorable para que estos microorganismos aparezcan.

Por eso es importante seguir las siguientes recomendaciones: desinfectar constantemente brochas y pinceles usando jabones bactericidas o fungicidas, utilizar espátulas para sacar cremas o bases de maquillajes para evitar introducir los dedos, de igual forma se deben tapar bien los productos para evitar sean contaminados.

En conclusión, para evitar problemas de salud ocasionados por los maquillajes, es necesaria una buena higiene tanto con el producto, como con los utensilios. Al mismo tiempo, es muy importante retirar el maquillaje para de esta forma eliminar los contaminantes que posiblemente se han adherido a este.